Croquetas de Quinoa, Verduras y Garbanzos

Hoy es Miércoles y debería estar participando en el #MM Miércoles Mudo, pero es que todavía no he podido pasar a visitar toooodos los blogs que participaron la semana pasada. Lo mínimo es visitar y comentar las entradas de mis compañeras blogueras, pero es que no me da la vida en participar todas las semanas, así que, pidiendo mil disculpas a todas ellas, intentaré ir pasando para ver el pasado #MM en el cual si que participé.

Cuando ví la entrada del  Concurso de Recetas Frutas y Verduras de Otoño de mi amiga Yo misma, para nada pensé en tener alguna que presentar, así que, como además últimamente no tengo casi tiempo de nada (se me escurre entre los dedos y no sé cómo), pues tampoco pude comentar nada en su blog. A veces lo hago desde el móvil, pero es que últimamente no me deja acceder a los comentarios de blogs y no sé el porqué...

La cuestión es que ayer hice para comer Quinoa con verduritas y garbanzos y sobró bastante. Lo dejé en la olla y después de comer pensé "esto lo aprovecho yo, vamos que si". A media tarde, me puse y trituré el sobrante y, como ya estaba en este caso todo hecho, pues no quedó más que añadirle un poco de pan rallado para que la masa cogiera más consistencia y formar las croquetas para así dejarlas listas para hacerlas para cenar, jejeje. Como hice bastantes, pues congelé la mitad y ya están listas para la próxima.

Ha sido la primera vez que he hecho croquetas con sobras y ayer me sentí, ¡¡¡hasta creativa!!!, jajaja y no porque pensara que yo era un caso excepcional (nooooo, nada de eso, que lo sé bien), sino porque me sentí de repente más cercana a nuestras madres y abuelas que hacían casi de la cocina una alquimia y con 4 ingredientes cogidos momentos antes directamente de la tierra, te preparaban una enorme variedad de recetas ricas y sanas... en este caso, claro está, yo me sentía una mera aprendicilla arrimada a las faldas de tan grandes mujeres.

La receta es muy sencilla, ni más ni menos que formar croquetas con sobras, jejeje, ¿cuántas veces se han hecho de sobras de cocido, por ejemplo?. Si que puedo decir, que han gustado muchísimo y que nuestro Cucolinet mordía, saboreaba y miraba el trozo que le quedaba en la mano y a continuación el plato para echar mano de otra en cuanto se le acabara la que obraba en su poder.

Vamos con ella, aunque indicaré las cantidades que he puesto yo (y siempre lo suelo hacer todo a ojo, excepto la medida de quinoa y agua):

- 300 ml de Quinoa (si ya sé, que no es normal decirlo en ml. cuando no se trata de un líquido, pero me resulta cómodo hacerlo así para poner después las medidas de líquido ;D).
- el doble de agua
- 1 manojo de Ajos tiernos
- 3 Carlotas (también llamadas en otros sitios zanahorias, son las naranjas)
- 1 trozo de Calabaza (no sé decir cuánto... la que a uno/a le apetezca, jejeje)
- 3 ó 4 puñados de Garbanzos cocidos (más bien, al gusto)
- Sal
- Aceite de Oliva
- Cúrcuma (desde que la he descubierto a ella y a sus extraordinarias propiedades, la pongo en casi todo)

Poner los Garbanzos a cocer sólo con agua en una olla a presión o en una olla normal, sin sal (yo pongo muchos a cocer y después aprovecho el resto para hacer Falafel o el rico e increíble Pastel de Garbanzos y Chocolate (este fin de semana, cae seguro, jejeje).

Lavar o poner un poco a remojo la Quinoa.

Mientras, se corta todo en trocitos más o menos pequeños. Se pone en una olla un poco de Aceite de Oliva y se rehogan los Ajos tiernos picaditos. Tras esto, se añaden el resto de ingredientes (excepto la Quinoa y el Agua) y se rehogan un poco. Por último, escurrir la Quinoa y echarla a la olla con el resto de ingredientes. Aprovechamos y rehogamos un poquito y terminamos de corregir de Sal y añadimos un poco de Cúrcuma, si no lo hemos hecho antes. Para finalizar, añadimos las dos medidas de Agua (recuerdo que es una medida de Quinoa por dos medidas de Agua).

Tapamos la olla, dejamos a fuego medio-alto que comience a hervir y bajamos a fuego suave para que se haga lentamente. En total, sobre unos 20 minutos. Tiene que quedar sin agua y sueltecita.

Antes de comer, añadimos y mezclamos los Garbanzos cocidos o bien, si se prefiere, se añaden un poco antes de que termine la cocción y mezclamos.

Como se trata de hacer Croquetas con las sobras, pues como he dicho antes, trituramos, pasamos a un bol y añadimos pan rallado poco a poco hasta que la masa coja consistencia y se pueda trabajar. Formamos las Croquetas y freímos a aceite caliente. Después las dejamos en un plato sobre papel de cocina o papel absorbente para que recoja el sobrante de aceite.

Una ventaja, que se pueden congelar ya formadas y después sólo queda freírlas sin necesidad de descongelarlas.

Espero que os gusten tanto como han gustado en mi casa. ¡Qué aproveche!.