Estamos leyendo: Las princesas también se tiran pedos

Bueno... no es que lo "estemos leyendo" exactamente, si que lo hemos leído alguna que otra vez, pero es que a mí me encantó y creo que es super divertido. Está claro es gustará más a las niñas que a los niños, pero desmitifica la perfección de las princesas y no las pone como guapísimas, divinas, super glamurosas... al fin y al cabo, las necesidades fisiológicas de los cuerpos son iguales aquí y en China (por decir un lugar) y desde el currito hasta la princesa o reina con más poder (o príncipe o rey, claro está, jajaja). Los pedos, pedos son y salen igual en toooodos los culos, jajajaja, ay me parto, que escatológica me estoy poniendo XDDD. También se habla de diferentes tipos de pedos, pero eso es otro cantar, jajaja, centrémonos...

Se trata de un cuento de la editorial Algar, escrito por Ilan Brenman e ilustrado por Ionit  Zilberman. La historia trata de una niña, Laura, que regresa a casa muy preocupada porque en el colegio, los niños les han dicho que.... las princesas ¡también se tiran pedos! O_O. Y claro, esto crea en la niña una preocupación, porque qué suele pasar, que siempre se "vende" a las princesas como perfectas y claro, estas cosas "no son de princesas".

El padre, al que le encantan los buenos libros y las buenas historias (y que tiene una biblioteca que ya la quisiera yo para mí), se va en busca de un ejemplar antiquísimo y valiosísimo, ni más ni menos que El Libro Secreto de las Princesas y ahí están tooooodas ellas con sus secretos "intestinales", jajajajaja. La niña va diciendo determinadas princesas y el padre comenta qué les pasaba y cómo fue la historia "en realidad"... ejemplo, (solté vairas carcajadas... bueno, yo sola no, porque el padre de la criatura, también la soltó conmigo, pero no quiero poner justo esa porque lo mismo le quito el encanto y la sorpesa): La Sirenita - era la que más fácil tenía lo de disimular sus problemas pediles, porque claro, en el agua y con tantas vueltas y volteretas, podía disimular muy bien, jajaja, a ver por qué os creéis que siempre estaba así, no es que fuera super vivaracha y al mar de contenta, es que con tanta vueltecita y remover el agua, decía que salían burbujitas, pero de eso nada monada, XD.

Para acabar, su papá le aclara que sean como sean, sus papás siempre, siempre les querrán, se tiren pedos o se tiren eructos... Una gran lección y conclusión porque así es, siempre querremos a nuestros hijos sean como sean, porque son un trocito de nuestro ser, de nuestro corazón ♥.

Sin embargo a mi Cucolinet, no termina de gustarle y es que creo que con eso de que son princesas y de que le ponemos tanto empeño a veces en leerlo, pues como que no... está más por la labor de algún que otro que ahora mismo le tienen conquistado, junto con Yo mataré monstruos por tí, y de los que ya iré hablando. No obstante, los niños siempre tienen temporadas, pero es importante, por lo menos para mí, que haya diversidad de literatura para ellos, con la que poder disfrutar todos juntos.