viernes, 4 de octubre de 2013

La verdad y toda la verdad

Viernes, mi día de pausa, lectura, reflexión... ya sabéis, de la mano de mi librito. ¿Reflexionáis conmigo?.


El buda de la sinceridad


"Dar la verdad sobrepasa a 
todo otro dar". 


Imagne de Desmotivaciones


En una de las máximas más célebres, Jesús de Nazareth decía: "La verdad os hará libres", Sin embargo, en una sociedad en la que priman las apariencias y los contactos superficiales, no siempre es sencillo poder expresar lo que de verdad pensamos.

Hay verdades que duelen como cuchillos -y no ayudan a nadie-, en tanto en que otras sirven para derribar muros y acercar a las personas. Antes de optar por la sinceridad, si el asunto es delicado podemos hacernos las siguientes preguntas:

1. ¿Está preparada esta persona para saber la verdad?.
2. ¿Servirá para hacerla avanzar o, por el contrario, sólo lograré bajar su autoestima?.
3. Es superior el beneficio al daño que puede causar?.
4. Estoy yo en condiciones de emitir un juicio objetivo?.

Ante la duda, la verdad -por difícil que sea- es siempre la alternativa correcta. Tal vez primero obtengamos una reacción adversa, pero a la larga cosecharemos el aprecio y respeto de los demás.


Progresión de mentiras

Una buena razón para decir la verdad: cada mentira requiere que inventemos otras cien para que no nos descubran. Y cada una de las cien...

Me incomoda mucho la mentira, no sé si desde siempre, porque no recuerdo qué hacía de pequeña, y lamentablemente tampoco puedo preguntarle a mis padres (más quisiera yo). Pero hace ya mucho, desde que recuerdo, que no me siento cómoda con ella. Tanto, tanto, que hasta cuando son mentiras piadosas me cuesta horrores y diría que hasta se me nota, porque como soy así tal cual, lo que se ve, pues pasa lo que pasa y es que supongo que tengo que poner cara de no creérmelo ni yo. Así que ¿qué hago?, intento por todos los medios decir siempre la verdad, porque es lo correcto, porque me siento cómoda, porque no engaño a nadie y, sobre todo, porque no me engaño a mí misma.

A pesar de ello, voy a tomar muy buenta nota de esta pequeña lista a tener en cuenta para preguntarme en ocasiones muy puntuales, antes de decir una verdad a alguien. Eso sí, haré como decía Mayra Gómez Kemp y haré un "hasta aquí puedo leer" practicando silencios y/o verdades a medias... vamos, lo que puedo venir haciendo hasta la fecha.

Sinceridad... hasta me gusta cómo suena, me parece una palabra realmente bonita. Respetarte a tí mismo, respetar a los demás... para mí es todo un conjunto. Un Valor a tener muy en cuenta y que intentamos enseñar a mi peque y por ello, a veces sufro enormemente, aunque parezca mentira, como por ejemplo al tratar el tema de Reyes Magos. Así que, aquí en concreto, le doy cien mil vueltas a cómo dar una respuesta válida, verídica, pero sin chafar los sueños e ilusiones de nuestro Cucolinet, y puedo asegurar, que es ¡¡¡Muy Difícil!!!, la mente se pone a cien y en fracciones de segundo es capaz de valorar enoooormes posibilidades para dar una respuesta, para comentar... casi diría que se podría ver el humo salir de la cabecita, jajaja.

Así que en casa intentamos no mentir y sobre todo a él, y es por ello que me sorprende una barbaridad, cuando contesta inventándoselas al vuelo. Pero bueno..., ¿esto qué es?, jajaja. Hay veces que me troncho de la risa, pero otras, me enfado, en función de las circunstancias claro está. Cierto es que últimamente, en lugar de decir "no hay que mentir", le decimos "hay que decir siempre la verdad" y él mismo de vez en cuando, también nos lo dice, como quien repasa una lección aprendida y practica con sus compañeros y amigos. Así que, cuando está haciendo una trastada y no se le escucha, mientras puedo llegar a su lado y ver qué hace, le pregunto "¿qué haceees?" y cuando el silencio hace eco, y acto seguido se oye un "mmmmm, pueeeeeeeeeeessss", a continuación digo "la verdaaaad" y ¡oye, hasta parece que funciona", jajaja.

Hay personas que son unas verdaderas maestras en esto de la mentira, pero siempre se ha dicho que "se pilla antes a un mentiroso que a un cojo", porque la enorme cantidad de mentiras que surgen a continuación, hay que mantenerlas, recordarlas y a cada una le siguen más y más y más, y ¿quién es capaz de mantener el efecto de esa desmedida bola de nieve?.

¿Cómo enseñáis vosotros el valor de la verdad a vuestros peques?.

¡¡¡Feliz Fin de Semana!!!, con una verdad tras otra ;^D.

8 comentarios:

  1. En el día a día creo que todos soltamos miles de exageraciones, pequeñas desviaciones de la verdad, mentiras piadosas...Pero eso no tiene nada que ver con ser sincero en las cosas importantes. Yo tampoco soy amiga de las mentiras y trato de enseñarle a Peque que ha de decirme la verdad (aunque me ha salido un tanto mentirosillo, jejeje). Veremos si me hace caso!
    Muas!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Puede que tengas razón Mo, aunque ya te digo que yo no soy amiga ni de exagerar ni de nada, más bien me callo y ya está. Esperemos que no caigan en saco roto las enseñanzas, porque a mí también me salió un pelín trolero, jajaja.

      Besotes!!!.

      Eliminar
  2. A veces mentimos por falta de valor, porque no podemos afrontar la verdad o la realidad que estamos viviendo, otras mentimos por miedo, para que nos quieran o porque tenemos miedo a que nos dejen de querer... ¡cuántas razones para mentir¡ y qué lios puede organizar una mentira. La peor de todo para mi es que cuando alguien te miente (la mentira tiene las patas cortas, decimos aquí) se quiebra la confianza y es complicado volver a creer en esa persona.
    La forma de enseñarle a mi hija es diciendole siempre la verdad y viendo que no miento a los demás. Y detesto las mentiras piadosas. Mejor callar o cualquier otro recurso antes que una mentira piadosa.


    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Una buena forma de enseñar Itsaso, predicando con el ejemplo. Yo espero que viendo que nosotros no mentimos, así lo haga él.

      Muchos Besotes!!!.

      Eliminar
  3. No, a mí tampoco me gusta la mentira y pienso que para mentir mejor callarse. Aunque reconozco que en según que casos es imposible no hacerlo. Espero no tener que hacerlo más pero... eso nunca se puede asegurar.
    Besos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Así es Piruli, cierto que nunca se puede decir de este agua nunca beberé, pero si tener las ideas y los principios claros.

      Besotes!!!.

      Eliminar
  4. Qué interesante esta reflexión. La primera pregunta de las cuatro me la hago siempre que tengo que darle una mala noticia a los papás con los que trabajo y no siempre tengo clara la respuesta. ¡Qué difícil todo a veces!.
    Un besito y feliz finde princesa.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Terapeuta debo decir que en esta entrada pensé mucho en tí y casi casi te nombro, pero al final no lo hice. Sólo hubiera dicho que te recordaba y que incluso te la dedicaba :). Eres una mujer admirable!!!.

      Muchísimos Besotes!!!.

      Eliminar

¡Gracias por pasarte!. ¡Gracias por tus palabras! :).

LinkWithin

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...