Artículo aparecido en El Correo Gallego, Ser Doulas habla sobre lo positivo del contacto y del respecto a las necesidades de nuestros bebés. La única pega que le encuentro al artículo es que hayan utilizado una foto en donde la mochila que aparece no es precisamente un portabebé ergonómico.
Dulzones carritos desbordantes de lazos y montados sobre ruedas Art Decó pasean por las plazas gallegas. Pero nuestros primeros antepasados no optaban precisamente por portar a los bebés en cuadriciclos. Los llevaban en el regazo, asegurados con soportes fisiológicos y en permanente contacto con la madre. Entidades como Ser Doulas recuperan todas esas técnicas milenarias "para reforzar la relación de respeto de los padres con el bebé, desde una mayor empatía en la educación hasta esa restauración del porteo fisiológico".
A los talleres organizados en A Coruña por Ser Doulas, acuden cada vez más parejas, con una gran participación de los hombres. Beatriz Fernández, que trabaja como doula, técnica en educación infantil y asesora de porteo, recuerda las desventajas de los carritos: "Los niños van con la espalda totalmente recta, en una postura contranatura, los niños necesitan más proximidad y cercanía". ¿De dónde procede el porteo fisiológico? Las culturas más antiguas ya usaban este sistema que permite "mantener la espalda del bebé en forma de letra ce en vez de recta, de forma respetuosa con su fisiología y su desarrollo físico/emocional". Otra opción apta para todos, salvo recién nacidos: "Llevarlo con las rodillas más altas que el culete, postura incluso recomendada por los pediatras para prevenir casos de displasia de cadera".
Esa relación de respeto en la crianza también se traslada a las conductas naturales del niño. Por ejemplo: ¿hay que forzarlo a dejar el pañal? Según Nuria Otero, formada como pedagoga, psicopedagoga, doula y orientadora familiar, "a veces obligamos a los hijos a hacer cosas no enseñables como el control de esfínteres". Otero indica que "no podemos quitarle al niño el pañal a la fuerza a los dos años porque aún no sabe controlarse, si le damos su tiempo lo abandonará él solo entre los tres y cinco años". Admite que muchas circunstancias vienen forzadas por la propia sociedad: "Como a los dos años el niño entra en la guardería, los padres ya quieren prepararlo para no dar problemas y aceleran sus períodos de desarrollo". Esta doula concluye que "por la comodidad del adulto, no debemos imponerle al pequeño aspectos conductuales ni enseñarle demasiado, aprenderá mejor jugando".
la gran influencia asiática.
El gigante asiático se impone hasta en el porteo fisiológico, que recupera técnicas ancestrales de ese continente. Más allá de las mochilas, Beatriz Fernández recomienda "portadores que pueden llevarse a un hombro como bandoleras, a dos hombros y enlazado a la cadera, o más versátiles como un fular que se anuda de diferentes formas". Como asesora en este proceso, señala que "el bebé debe mirar hacia nosotros". En los grabados del siglo XVII, aparecen mujeres con peques en bandoleras de todos los rincones del mundo. En Europa se usa más el fular por su versatilidad, en Asia el dispositivo de hombros y cadera, en Centroamérica la bandolera... "Las mujeres africanas se hacen pañuelos a juego con sus vestidos, para ellas resulta incomprensible ir a comprar sin su bebé", destaca Beatriz.
Según las doulas, el porteo fisiológico "favorece la lactancia porque el niño se encuentra cerca del pecho, también permite que entre en el mundo del adulto, podemos cocinar con él en el colo". Última recomendación: "Aporta todo lo necesario para los cólicos, calorcito, masaje y relax". En esta educación emocional, la psicopedagoga Nuria Otero también rechaza la imposición de premios o castigos: "Antes debemos comprender por qué se portan mal, saber si algo no marcha bien, explicarles el porqué de las cosas y tratarlos con el mismo respeto que queremos para nosotros". phermida@elcorreogallego.es
?www.serdoulas.blogspot.com
Respeto al bebé: más 'colo' y menos carrito
16.01.2011 Ser Doulas recomienda que "no se le quite al niño el pañal a la fuerza a los dos años"//Apuesta por llevar al peque en bandoleras "en contacto con los padres"
PATRICIA HERMIDA
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| FELIZ EN EL COLO Un niño llevado con porteo fisiológico por las calles de Ferrol FOTO: Kiko Delgado |
A los talleres organizados en A Coruña por Ser Doulas, acuden cada vez más parejas, con una gran participación de los hombres. Beatriz Fernández, que trabaja como doula, técnica en educación infantil y asesora de porteo, recuerda las desventajas de los carritos: "Los niños van con la espalda totalmente recta, en una postura contranatura, los niños necesitan más proximidad y cercanía". ¿De dónde procede el porteo fisiológico? Las culturas más antiguas ya usaban este sistema que permite "mantener la espalda del bebé en forma de letra ce en vez de recta, de forma respetuosa con su fisiología y su desarrollo físico/emocional". Otra opción apta para todos, salvo recién nacidos: "Llevarlo con las rodillas más altas que el culete, postura incluso recomendada por los pediatras para prevenir casos de displasia de cadera".
Esa relación de respeto en la crianza también se traslada a las conductas naturales del niño. Por ejemplo: ¿hay que forzarlo a dejar el pañal? Según Nuria Otero, formada como pedagoga, psicopedagoga, doula y orientadora familiar, "a veces obligamos a los hijos a hacer cosas no enseñables como el control de esfínteres". Otero indica que "no podemos quitarle al niño el pañal a la fuerza a los dos años porque aún no sabe controlarse, si le damos su tiempo lo abandonará él solo entre los tres y cinco años". Admite que muchas circunstancias vienen forzadas por la propia sociedad: "Como a los dos años el niño entra en la guardería, los padres ya quieren prepararlo para no dar problemas y aceleran sus períodos de desarrollo". Esta doula concluye que "por la comodidad del adulto, no debemos imponerle al pequeño aspectos conductuales ni enseñarle demasiado, aprenderá mejor jugando".
la gran influencia asiática.
El gigante asiático se impone hasta en el porteo fisiológico, que recupera técnicas ancestrales de ese continente. Más allá de las mochilas, Beatriz Fernández recomienda "portadores que pueden llevarse a un hombro como bandoleras, a dos hombros y enlazado a la cadera, o más versátiles como un fular que se anuda de diferentes formas". Como asesora en este proceso, señala que "el bebé debe mirar hacia nosotros". En los grabados del siglo XVII, aparecen mujeres con peques en bandoleras de todos los rincones del mundo. En Europa se usa más el fular por su versatilidad, en Asia el dispositivo de hombros y cadera, en Centroamérica la bandolera... "Las mujeres africanas se hacen pañuelos a juego con sus vestidos, para ellas resulta incomprensible ir a comprar sin su bebé", destaca Beatriz.
Según las doulas, el porteo fisiológico "favorece la lactancia porque el niño se encuentra cerca del pecho, también permite que entre en el mundo del adulto, podemos cocinar con él en el colo". Última recomendación: "Aporta todo lo necesario para los cólicos, calorcito, masaje y relax". En esta educación emocional, la psicopedagoga Nuria Otero también rechaza la imposición de premios o castigos: "Antes debemos comprender por qué se portan mal, saber si algo no marcha bien, explicarles el porqué de las cosas y tratarlos con el mismo respeto que queremos para nosotros". phermida@elcorreogallego.es
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